El turismo es hermoso, ya que permite abrir la mente, ser más empático y disfrutar de las pequeñas cosas, siendo una de las recomendaciones de todo trotamundos conocer la historia.
Roma ha sido centro de varios acontecimientos increíbles mucho antes de los principios de la historia moderna, por tal motivo queremos presentarle los mejores monumentos históricos de la capital italiana.
Los destinos históricos de Roma más interesantes son:
1. Iglesia de San Pedro in Vincoli
Fue originaria en el decenio de 600 d.C., pero debido a la destrucción que hubo, fue restaurada a su esplendor inicial en el siglo XIX.
No es muy conocida por los extranjeros, ya que está escondida cerca del Coliseo de Roma. Pero a pesar de su escasa popularidad, muchos viajeros indican que es una visita imprescindible al ir a Roma.
Uno de sus mayores atractivos es la legendaria obra de Miguel Ángel: Moisés.
Se inspiró en las reliquias de las cadenas empleadas para atar a San Pedro cuando fue encarcelado en Jerusalén. Nació una idea y, debido al carácter y motivación del autor, se volvió una realidad.
Muchos analistas dictan que es una obra sumamente avanzada para la época y las herramientas empleadas. Por lo que parece imposible que Miguel Ángel pudiera esculpir con esa precisión.
Si es un amante del arte no dude en visitarla, será inevitable mirar el detalle de las formas, músculos y facciones de la cara sin mostrar admiración.
2. Plaza de España
La plaza de España es uno de los atractivos de la capital, volviéndose famosa gracias a su escalinata, coronada por la iglesia Trinitá dei Monti.
Está cerca de la prolongación de la Vía Condottila. La calle que concentra el mayor conglomerado de tiendas de lujo en Roma.
Sin embargo, el verdadero atractivo –y el más económico– es la escalinata. Donde los turistas se aglomeran para alcanzar el mirador y observar las mejores vistas panorámicas de Roma.
Por su parte, la iglesia Trinitá dei Monti cuenta con dos torres que protagonizan la plaza de España. Sus interiores están diseñados con cuadros y esculturas elaboradas entre el siglo XVI y XVIII.
3. Fontana de Trevi
Es un lugar mágico. Uno de los rincones más bellos, singulares y románticos de la nación.
Su carisma está estrechamente asociado al encanto de Roma, motivo por el que siempre está aglomerado de turistas. La mejor forma de disfrutar de la vista es a primera hora de la mañana.
Literalmente es un escenario de película, ya que ha sido el fondo de muchos filmes del cine italiano.
Fue construido a mediados del siglo XVIII como acueducto para abastecer de agua a la ciudad. Ahora es uno de los iconos de mayor valor histórico.
4. Plaza Navona
Cuenta con una amalgama de fuentes perfectamente distribuidas. La más popular es la fuente de los Cuatro Ríos, un conjunto escultórico hecho por Bernini en el siglo XVII.
Por su parte, las otras fuentes tienen un encanto peculiar, acompañado por un diseño limpio, detallista y seductor a la vista.
La plaza Navona es un rincón generalmente divertido y activo, además de un importante centro para el turismo italiano.
A lo largo de los años, muchos artistas han aportado su grano de arena –e incluso monumentos enteros– para volverla lo que es en la actualidad.
5. Galería Borghese
Es uno de los museos más afamados de Roma junto a los Museos Vaticanos.
Si es un amante del arte no podrá evitar emocionarse con las colecciones de la época romana. Aunque también se distinguen obras, historias y artículos del Renacimiento.
Para entrar es imprescindible reservar las entradas, de esta manera se graba el día y hora exacta para la visita.
6. Panteón de Agripa
Se trata de uno de los pocos monumentos en Roma que se pueden visitar de manera totalmente gratuita, aunque sigue en estado de conservación.
Fue construido por los romanos con la finalidad de ser la zona más interesante de la nación y la fábrica más grande del mundo. A día de hoy solo se emplea como fuerte atractivo turístico.
El material de elaboración inicial es el hormigón, para que no se cayera por el peso. Optaron por aligerarlo dándole la forma actual, pero sin dejarlo demasiado liso.
7. Campo de Fiori
A pesar de que no es tan conocida como la plaza Navona o Fontana de Trevi, se considera un destino encantador por excelencia. Muchas parejas vienen y se pasean por sus alrededores.
Es el lugar favorito de las personas es el centro, donde está la estatua de Giordano Bruno, uno de los filósofos y astrónomos italianos que destacaron en la segunda mitad del siglo XVI.
Todos los turistas que lo visitan se maravillan con la tranquilidad que desprende, siendo ideal para olvidarse de las complicaciones del trabajo, familia y amigos.
También divisará el mercado de fruta, que aglomera a todos los vecinos para compartir, jugar o pasar el tiempo.
8. Foro de Trajano
Es un foro ubicado entre el monumento de Victor Manuel II y el Coliseo de Roma. En su época, fue uno de los edificios más resplandecientes, decorado con oro y mármol.
Cuando dominaba el emperador Trajano, decidió crear un foro distintivo, dada la expansión de Roma. Por tal motivo trabajaron el terrero de una de las colinas cercanas al Coliseo.
En el nuevo espacio optaron por construir una joya arquitectónica e ingeniería avanzada, denominada Foro de Trajano.
Presumía una voluble plaza central, con basílica de dos plantas y una gran parte de su estructura decorada con mármol y estatuas de tamaño real. Superó a la mayoría de las basílicas en tamaño y diseño.
Siendo el emperador y autor intelectual, había una columna con la forma de Trabajo hecha de mármol. Esculpieron con todo detalle la invasión de Roma a la ciudad de Tracia, uno de los momentos más icónicos de la historia.
La columna ha sido una de las únicas decoraciones que han conseguido superar los desastres naturales, guerras y otros eventos.
A su alrededor solo quedan restos del foro, derrumbados tras el mayor terremoto en 1000 d.C.
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