La vida no perdona nada, el coronavirus como parte de la vida tampoco. Recientemente se ha informado la muerte de un barón de los narcóticos mexicano ha fallecido, esto nos muestra la fragilidad de la vida y lo inmutable de la muerte, además de que la pandemia que vivimos es real y que afecta a toda persona sin importar su poder, su situación social o su raza.
La muerte es la única justa por que arrasa con todos(as).
Juan José Esparragoza Monzón conocido como “EL NEGRO” murió en el nosocomio CEMSI ubicada en Culiacán, Sinaloa. Este hombre ingresó con un apodo y fue llevado a un lugar para velarlo. Luego llegaron policías federales ministeriales para llevarlo a oficinas forenses.
Posteriormente fue extraído de la misma sin dar a conocer el paradero del cuerpo. Estnidos e personaje se había evadido de la prisión en marzo de 2017 de un centro de detención de Culiacán, donde purgaba cárcel esperando su juicio en los Estados Unidos.
El personaje fue capturado con armamento y narcóticos el 19 de enero de 2017 en una operación de la Secretaría de Marina y la entonces Procuraduría General de la República.
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