La obesidad canina es una afección grave que puede dificultar la movilidad y el bienestar del animal. El perro obeso puede tener muchas razones detrás: predisposición genética, enfermedades relacionadas, dieta inadecuada, falta de ejercicio, entre otras. Además, la enfermedad puede interferir en varios sistemas del cuerpo del perro y desencadenar otros problemas de salud. Pero, ¿cómo diferenciar un perro en el peso ideal de un perro gordo? Para ayudarte, se ha preparado este artículo que muestra los niveles corporales de los perros y cuándo es motivo de preocupación. Compruébalo.
¿Cómo identificar a un perro obeso?
No es difícil saber si el perro está demasiado delgado o tiene sobrepeso. Básicamente, hay que observar la estructura de su cuerpo desde dos ángulos: desde arriba y de lado. El perro gordo, por ejemplo, presentará una capa de grasa muy gruesa en el tórax y el abdomen, que llega hasta la base de la cola. Ya en el animal desnutrido, los huesos de la región pélvica, las costillas y el abdomen son muy aparentes, sin ninguna grasa. Vea las características de cada peso corporal:
- Muy delgado: en un caso de desnutrición, toda la estructura ósea del perro es muy aparente y elevada. Es evidente que no hay presencia de grasa para rodear los huesos. También se observan otros signos, como ojos saltones, debilidad y dificultad para moverse.
- Bajo peso: sigue siendo un caso de atención, el perro bajo peso también se queda con la zona de las costillas y el abdomen visible incluso de lejos y sin grasa perceptible. En la zona pélvica, los huesos son más protuberantes, de forma menos crítica que en la situación anterior.
- Peso ideal: un perro sano tendrá vitalidad y disposición a su favor. Su cuerpo será delgado, pero sin huesos aparentes, y será posible sentir una ligera capa de grasa al tocarlo. La cintura tiene una silueta bien definida.
- Sobrepeso: si notas una capa de grasa más gruesa al tocar al animal, estate alerta. El perro con sobrepeso seguirá teniendo costillas palpables, pero la cintura pierde el formato más delineado.
- Obeso: en el perro obeso, se hace casi imposible diferenciar la cintura y el pecho, ya que tienen bastante grasa aparente en todos los ángulos. La distensión abdominal es muy visible. El animal necesita una intervención urgente para perder peso y recuperar su forma física. A este nivel, ya es posible que haya desarrollado alguna enfermedad derivada de la obesidad canina y tenga dificultades para moverse.
¿Cómo ayudar a un perro gordo a perder peso?
Dado que es un problema muy grave y puede desencadenar otros problemas de salud, la obesidad canina necesita un tratamiento inmediato, que consiste en un cambio completo del estilo de vida del animal. En primer lugar, es muy importante llevar al perro al veterinario para una revisión general. Sólo entonces será posible hacer una planificación de la alimentación y el ejercicio bien enfocada a su perro: es posible que el animal tenga que hacer la transición a una ración para perro obeso o a una alimentación ligera.
Los ejercicios también entrarán en la rutina de la mascota: pasear con el perro es esencial para cualquier animal. En el caso del perro gordo, hay que intensificar la práctica con paseos más largos y más veces al día (en este caso, incluso vale la pena buscar un paseador de perros que se turne con usted). Dentro de casa, algo muy eficaz es jugar con el perro más a menudo y no fomentar el morbo: invierte en juguetes y juegos para estimular a tu perro a correr y moverse.