Los últimos días del mes de marzo no fueron fáciles para el equipo desarrollador del conocido juego Among Us. Esto debido a que el juego sufrió algunas dificultades técnicas producidas a raíz de un ataque DDoS que tuvo como objetivo volver inestables sus servidores en Europa y Estados Unidos. Como es entendible, este incidente afectó en gran medida a los jugadores, quienes no pudieron acceder al juego por un total de 48 horas.
El ataque cibernético comenzó a efectuarse el 25 de marzo, momento en que la cuenta oficial de Among Us en la red social Twitter (@AmongUsGame) comunicó que el juego estaba sufriendo un intento de sabotaje. Recordemos que los ataques DDoS consisten en sobrecargar un servidor sometiéndose a una avalancha de tráfico que no puede soportar, interrumpiendo así su tráfico normal.
«El servicio no estará disponible mientras el equipo trabaja para resolver el problema; sin embargo, esto puede llevar algún tiempo, ¡así que tengan paciencia! Lamentamos las molestias causadas», publicó la cuenta @AmongUsGame para notificar a los jugadores la suspensión del juego.
Un día después, el 26 de marzo, se notificó que los servidores seguían fuera de línea debido al ataque. «Puede que los servidores se conecten y se desconecten, pero les avisaremos cuando creamos que son estables nuevamente, ¡lo lamentamos!», indicó el equipo de Among Us en otro tweet.
Finalmente, el 27 de marzo, se informó en horas de la noche que el ataque había sido controlado. “Bien, los servidores parecen ser estables y funcionar correctamente. Esperemos que el sabotaje no se repita – les mantendremos informados si algo cambia”, detallaron los desarrolladores en un tweet.
Incluso para las empresas y los servicios de Internet a gran escala, los ataques DDoS continúan siendo un desafío. Un gran ataque DDoS cerró PSN y Xbox Live en diciembre de 2014. Por desgracia, estos ataques son difíciles de prever y prevenir. Este tipo de ataques cibernéticos es un problema cada vez más común, y más frustrante, para los jugadores a medida que más videojuegos dependen de Internet.